jueves, 27 de octubre de 2016

ENTRE PUENTES COLGANTES Y QUESOS CUAQUEROS (Costa Rica)




















"Estos puentes colgantes del volcán Arenal son bien chiquitos, nada en comparación con los de Santa Elena, tiene que ir allá". Insiste mi caballero Lazarillesco mientras me pone el mini video del Parque Selvatura. “Y ya ve, se lo aconsejo sin ningún provecho, yo no puedo vender los boletos...”Pero sí vendía el "transfer" a Santa Elena a través de la laguna.
Ya me decía yo...en algún sitio estaba el misterio. Lo compro.
Una buseta nos lleva hasta Rio Chiquito y nos deja a la orilla de la laguna en donde atracara nuestro barco para pasar al otro lado y subir en otro minibús hasta Santa Elena.
Las tres horas de navegación nos descubren las caras ocultas del ARENAL, su cráter más activo, y el CERRO CHATO, tan inocente e idílico desde el agua, envueltos en girones de nubes etéreas que vuelan, los enlazan, los coronan y los ocultan a nuestros ávidos ojos en esta mañana plomiza de lluvias torrenciales.
No se ve ninguna actividad deportiva en la laguna, ni pájaros, ni pescadores, sólo las lanchas turísticas surcan sus aguas negras.
Arribamos a la otra orilla y nuestras compañeras de viaje se despiertan y empiezan a remover sus mochilones, buscan su buseta y se preparan para continuar el sueño en la hora y media del trayecto. ¡Piedras y más piedras! Y curvas cerradas y prados y ganados: la NATURALEZA DOMESTICADA nos da la bienvenida. Me recuerda la montaña santanderina. Me duermo con una extraña sensación de familiaridad al ritmo de los trompicazos de nuestra buseta.
Por fin llegamos a una especie de pueblo de montaña indio con todo lleno de gringuitos afanados de un lado para otro. ¡Gran desilusión! Una pseudo plaza, una carretera polvorienta y empinada para llegar a cabañas Eddy y pelea por la reserva, de malos modos. Habitaciones minúsculas pero las zonas comunes amplias y bien pensadas para sus clientes preferenciales (USA  USA  USA). Las vistas desde la cocina-comedor-salón compensan las malas vibraciones del manager, el valle se extiende a perdida de vista y dicen, que en días claros, se puede hasta vislumbrar el mar de Puntarenas.


Tengo que buscar otro alojamiento. Pregunto, miro…caros y destartalados pretenciosos. Sólo Cabinas El Pueblo podría convenirme pero esta completo. Sin embargo, su manager-dueño, D. Félix diré, hombre cabal donde los haya, me sugiere la Guest House de su sobrino camino a Monteverde y en el colmo de su amabilidad le llama por teléfono y viene a buscarnos.
Cabinas Mary seria mi refugio en Santa Elena, fuera del hoyo gris hotelero.
Gente sencilla y agradable que hacen sus primeros pinitos en la hostelería después de haber trabajado más de 10 años (la madre) de cocinera en uno de los mejores hoteles de la zona. Ademas, mi vecinita un amor.



D. Félix viene a ver si todo ha ido bien y charlamos un buen rato de la “historia”de Monteverde, cuando sólo la Lechería daba de comer a las pocas familias que vivían en la zona. Eran los CUAQUEROS, refugiados de USA cuando la guerra de Vietnam, que vinieron a instalarse en la Costa Rica pacifista.


Félix no se hace de rogar:
 “Se hicieron famosos por sus quesos maduros, muy trabajadores ellos, muy emprendedores. Nosostros empezamos también a criar ganado para leche y todo funcionó bien por algún tiempo.
Pero llegó el dia en que la mala administración (supertécnica contratada para “ayudarnos”) lo desbarató todo y nos vimos en la pura calle. Yo, capataz, tuve suerte y con el dinero de la liquidación puse mi hotel que nos ha salvado la vida. La empresa la vendieron a los mexicanos, a la multinacional SIGMA ALIMENTOS en 2013, todo productos refrigerados. Comercializan “nuestras” marcas, apreciadas en todo el país”.





Al día siguiente salimos de mañana a SELVATURA que todos recomendaban como los mejores PUENTES COLGANTES por encima de del bosque lluvioso “ primitivo” de MONTEVERDE. Tres kilómetros de recorrido a una altura de entre 12 y 60 metros por puentes anchos y fuertes, que pueden aguantar hasta 80 personas.
GRACIAS A LA TEMPORADA BAJA, a la lluvia benefactora, casi no había gente en los puentes, solo me crucé con un grupo de jubilados norteamericanos que escapaban a toda marcha de los goterones.






Brillaban las copas de los arboles bajo la caricia de algún rayo de sol osado que acuchillaba la niebla colgada de las ramas bajas. Se oía el canto lejano de los pájaros escondidos en sus refugios y, de repente, alguien gritó: “Allí enfrente.. abajo…un QUETZALLLLLLLLLL. Pero la suerte no me sonrió y sólo pude vislumbrar una mancha rojiazul lanzada en picado por entre los ramajes. Tres horas en comunión con la NATURALEZA. Había cumplido uno de mis sueños más acariciados desde que un investigador del Institut Francais me contó como trabajaban por encima de la copa de los arboles en la Guayana Francesa.


Por la tarde quería ir andando hasta CERRO PLANO para ver dos tiendas de artesanía: Luna Azul y Art House, especializada en mascaras BORUCA Y MALEKU que había visto decorando un hotel.




Se desató un diluvio imponente ya llegando a Luna Azul y tengo que darle las gracias desde aquí a la joven encargada que me acogió, me contó tantas anécdotas interesantes y hasta tomamos el té juntas. Estudiante de enfermería, graciosa, de gusto exquisito y claros planes para el futuro: aconsejar a las mujeres de la zona en alimentación, cuidado de los niños y parto natural en el hogar…



En un claro salgo pitando por la carretera pedregosa hasta la Art House. Un diminuto “bosque lluvioso”, un GAZEBO DE MADERA PALPITANTE, una colección de pinturas extraordinaria de artistas locales(Selena Avendano, Rodolfo Uder, Julio Vargas …) y mascaras, mascaras de una imaginación desbordante: un cantico al color, a la suavidad de las formas, a las leyendas, a los dioses, a los diablos, a los animales protectores MALEKUS y BORUCAS. LAPAS rojas para la fidelidad; BUHO como guía de los viajes nocturnos; JAGUAR, para la audacia o la inteligencia; SERPIENTE DE CORAL, el poder, sólo para los chamanes y MARIPOSA, para la buena suerte y la paz.  Ligeras, en madera de bambú, de BALSA ( Ochroma Pyramidale) que es también muy utilizada en marquetería.








Vuelve a llover a cantaros cuando llego a la Escuela de Amigos de Monteverde, cerquita a LA LECHERIA. Una mujeruca me informa del bus local, el barato. El otro es más elegante y más rápido. Yo no tengo prisa y al cuarto de hora me encaramo en el bus, como dice ella, repleto de estudiantes de alguna escuela de Monteverde. Las escuelas privadas son muy caras pero buenas…para los ricos añade con una sonrisa de conmiseración.
Al día siguiente saldría en el primer autobús a PUNTARENAS por Lagartos y de allí, por la Costanera, a QUEPOS Y MANUEL ANTONIO. La espera, frente al mar y a la sombrita de los almendros del nuevo paseo marítimo Puntarenas incendiado por un sol rabioso, me devuelve al mundo de los sueños.
PUNTARENAS, la otrora “perla del Atlántico”, hace tiempo que perdió sus encantos.

FOTOS: Cortesía de GOOGLE





6 comentarios:

  1. Bueno, pues aqui estoy de nuevo con el "boton enderezado", que esto es la mio, Sr. Tigre.
    Merecio la pena llegar a Santa Elena. Si.
    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Siempre nos sorprendes con tus reportajes...

    Gracias

    ResponderEliminar
  3. Sí, sin lugar a dudas, mereció la pena. Bosques, puentes y cuáqueros, una mezcla inigualable de esas que se encuentran por el mundo.

    Gracias y saludos.

    ResponderEliminar
  4. Te hubiera gustado y, seguro, habrias sacados unas fotos inigualables, habrias captado el alma de los jirones de niebla colgando delicadamente de las ramas de los arboles...
    Saludos

    ResponderEliminar
  5. Muchas veces, Igoa, una frase de una conversación a la que a lo mejor en principio no prestaste demasiado interés puede ser la que, al cabo de meses o años pone en marcha un proyecto, un viaje. tal vez un sueño de comunión con la naturaleza, que siempre agradecerás a tu buen investigador del Institut francais.
    Besos: Emilio

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Asi es, amigo Emilio. Aqui ando sonando todavia.
      Ahora estoy preparandome para LOS PAISES BAJOS, QUE PARECE QUE ODIAN EL RECUERDO IMPERIAL..Esa sera la puerta. Luego, si Ganesh me lo permite, Jajaja!, Canada de mis amores, que ya llevo meses de infierno por aqui con eso del cambio climatico.
      Un abrazo

      Eliminar