Era viernes por la tarde cuando llego de Brujas
en el tren al Galia donde había dejado todos mis bultos. Parece que este fin de
semana esta todo reservado.
"Solo podrá quedarse esta noche, a menos que
alguien anule la reserva". Me espeta a modo de saludo el nuevo encargado
que no tiene ni idea de mis tratos anteriores. "Bruselas está al completo,
pero intentare buscarle algo conveniente".
Por la mañana me manda a la plaza ANNEESENS en un
taxi que resultó de un belga casado con una cocinera asturiana, inmigrante de
los años 60. Hombre cabal, dueño del taxi tras largos años de esfuerzo, amante
de España, del norte, donde pasa las vacaciones de verano sin los sofocos del Mediterráneo.
Le propongo que me lleve al aeropuerto el domingo pronto…
“No, no puedo. Los domingos ahora ya no trabajo.
Mis hijos han terminado los estudios y trabajan. Ya no lo necesito. Tendrá que
pedirlo por teléfono desde el hotel… es que este barrio…”
Pronto sabría de que barrio se trataba.
El hotel “recomendado” estaba situado en la parte
alta del barrio, del MOLENBEEK, casi en la esquina de la plaza ANNENSSEN y el bulevar
LEMMONIER. Es una casa antigua remodelada recientemente sin ninguna gracia, con
un manager de nariz aguileña, desconfiado y secante, de ingles entrecortado de
magrebí.
“Hay que pagar ahora”. Dice.
“Tengo que ver primero la habitación”. Digo.
Con el dinero se le suelta la lengua: “Vaya con
cuidado, no vuelva por la noche, puede comer barato en Lemmonier, aquí cerca”.
En estas entra un africano cadenudo y trajeado;
cachas y pelo abrillantado; diente de oro y dedos ensortijados que busca
habitación single, dice. El manager insiste en que no puede traer a nadie ni de
día ni de noche a la habitación y allí los dejo discutiendo, más bien
repitiendo lo mismo cada uno por su lado.
Salgo y busco el chiringuito del bereber. Hasta
terraza tiene, con los viejos parroquianos marroquíes jugando al dominó. Es un
tipo fornido de ojos relampagueantes, dicharachero, de buen francés y ganas de
regateo. Finalmente una hermosa mujer madura, pañuelo de flores a la cabeza, me
preparara un menú de “amigos”.
¿Y MOLENBEEK?
https://es.wikipedia.org/wiki/Molenbeek-Saint-Jean
Lo descubro y cuento.
Se tienen noticias desde el s. IX: pequeña aldea
con un pozo milagroso que atrae a muchos peregrinos, el de Santa Gertrudis. Siguió
rural e independiente hasta el s. XIII en que quedó anexionado a Bruselas. La
suerte le sonrió con la apertura del canal BRUSELAS-CHARLEROIS a finales del
siglo XVIII y con un pequeño puerto y más tarde hasta con tren, se convirtió en
“la pequeña Manchester” aglutinando la clase trabajadora belga y los
inmigrantes de Italia y otros países mediterráneos.
No duraría su buena estrella.
No duraría su buena estrella.
Con las crisis del siglo pasado Molenbeek perdió
su industria y se ha convertido en un municipio (ahora independiente) de los más
pobres de Bélgica. Los distritos de la parte baja, cercana al canal, con una
población de subproletariado y una cota de musulmanes (llegados en los 60) que
alcanza ya el 35/40 % y, con el 40 % de jóvenes musulmanes (turcos, marroquíes,
tunecinos) fuera del mercado de trabajo es un foco de radicalización y
violencia. 20 mezquitas contadas en la zona con imanes extranjeros SALAFISTAS.
Dicen.
Por todos es reconocido que este barrio esta
dejado de la mano de dios y sobre todo de la administración de Bruselas. La
prensa lanza ataques encarnizados contra sus jóvenes que tacha de radicales,
extorsionistas, drug dealers y todos los vicios que imaginarse pueda.
Empiezan con la letanía…
El que asesinó a MASSOUD… de Molenbeek.
Los del ataque de MADRID…de Molenbeek.
Los de CHARLY, los de NIZA, los de PARIS…de Molenbeek!
“Un paraíso seguro para los terroristas”.
La policía lo achaca a falta de efectivos…no
pueden vigilar las 24 horas del día a los más de 8000 potenciales terroristas.
¿Qué le deparara el futuro a este barrio populoso
( casi 100 000 ha.) preso de la desesperación, cuyo único solaz se encuentra en
las garras del radicalismo?
El Ayuntamiento intenta paliar las carencias
organizando cursos, charlas y actividades integradoras pero se declaran
impotentes ante la magnitud de los problemas.
Sin embargo, Molenbeek no es solo eso. La parte
alta del barrio acoge a gentes deseosas de cambiar esta imagen tan negativa,
implicadas en la ayuda social y descubrimiento y participación de culturas como
medio de convivencia.
Desde mediados de julio hasta septiembre se
desarrolla el FESTIVAL BRUXELLONS en el KARREVELD CASTEL (adquirido en ruinas a
la familia Villegas por el municipio en 1930) con teatro, circo, magia…en el
parque, el patio, las terrazas, en la granja.
El problema es que no está al alcance de la mayor
parte de la población: Mínimo 16 euros para cada espectáculo y el buffet a 21
euros. Bar y café en consonancia.
¿Cuántos pueden soñar con atravesar sus puertas?
Eso, suponiendo que estén al tanto y que les interese.
¿Y de parte de la población musulmana existen
proyectos, acciones, gente comprometida dispuesta a luchar contra la
ignorancia, el aislamiento, el adoctrinamiento y el terror?
Sí.
TENEMOS a Azziza El Miamouni, de origen marroquí,
que junto con otras 300 madres, van de casa en casa visitando familias aisladas,
explicando, ayudando a otras mujeres. Se reúnen en plazas y sitios públicos,
luchan contra la radicalización de los jóvenes.
TENEMOS a Ras El Hanout, que en su escuela de
teatro LÉpicerie ha montado un centro cultural sin ánimo de lucro donde los jóvenes
pueden venir con sus amigos, hacer reuniones, actuar, escribir sus propias
obras de teatro, proponer actividades lúdicas y aprender, formarse con LA
TALENTED YOUTH NETWORK, todo gratis.
Su obra “DE BRUXELLES A LA MECQUE” ha conseguido
llegar al público a pesar de tratar de un tema sensible.
Y TENEMOS el CIRCUS ZONDER HANDEN, donde niños de
diferentes culturas aprenden juntos el camino del progreso y la integración. La
tarifa va de 5 euros a 20 por semana.
https://vimeo.com/113703767
https://vimeo.com/113703767
Y ADEMAS TENEMOS EL CollecActif que lo forman un
grupo de personas con el objetivo de crear un sistema de solidaridad
horizontal, instalando una estructura de recuperación.
Y otros, muchos otros que insisten en que
MOLENBEEK es un municipio vivo, joven, dinámico, cambiante y emergente que
precisa ayuda para recuperar su alma, su imagen oscurecida por el
sensacionalismo de los medios de comunicación y el derrotismo oficial.
MOLENBEEK SE LO MERECE.
FOTOS: Cortesía de GOOGLE
Llegaron, estan ahi, muchos nacieron ahi, pero algunos no tienen las raices muy profundas.
ResponderEliminarHa llegado la hora de progresar juntos. Dicen.
"Es tambien nuestra tierra y nosotros tenemos y queremos tambien aportar nuestros valores, nuestra cultura".
En cuanto a la integración de los musulmanes no soy optimista. Quizá dentro de unas cuantas generaciones.
EliminarBesos
DIFICIL SERA, pero muchos quieren intentarlo. Veremos.
EliminarBesos
Ciertamente interesante ...
ResponderEliminarGracias, Mark
EliminarSaludos
Me encanta este post porque me preocupa especialmente en vista de las corrientes xenofobas y racistas que se están formando. Pero para eso has cumplico años, para ser una maduraza cabal con los muebles de la cabeza bien puestos. jeje
ResponderEliminarLo primero es que crear barrios de lo que sea no integra sino que margina mas. Lo segundo es que las medidas polciacas tiene n su utilidad, pero no son nunca la "solucion".
La cultura si, claro. Pero siempre la cultura del saber, la de una buena formación. No la de la droga la violencia y la ignorancia disfrazada de modernez.
La buena y la mala gente surge en los sitios mas insospechados, nunca va por barrios. ¿DE verdad se siente uno mas seguro de noche por uno de esos muelles donde atracan yates de lujo?.
Gracias, amigo Carlos! Tus palabras son un balsamo ahora que acabo de perder un escrito sobre Canada. He salido volando para parar la lavadora que rugia como la reina de la selva y...catastrofe, le he dado a alguna tecla maldita...
ResponderEliminarA la vuelta, NADA!
Un dia de trabajo perdido y nadie para insultar...Jajaja! No me lo podia creer!
Hale! A empezar de nuevo. Por la tarde. Cuando se me pase la rabia.
Como bien dices "barrios de..." son una bomba retardada. La integracion pasa por vivir juntos respetandose, claro!
Eso toma tiempo y buena voluntad.
Un abrazo
Bueno, veo que en Bruselas, y más concretamente en el barrio Molenbeek. Lo tuyo es intuición femenina ¿pero cómo caíste ahí?. En todo caso me alegro porque así nos has contado, desde tu prisma, esa realidad de un barrio tan denostado ¿con razón?.
ResponderEliminarBueno, como te tenía un poco abandonada, en cuanto a visitas. Voy a leer el anterior 'post' que también tiene buena pinta.
Besos, niña.
OHjo! Que dicen por aqui. Si es su merce El Tigre de Leon...Graaacias!
EliminarY no cai alli, me echaron. Jajaja!
Alli todo es posible, Blas, hay gente dispuesta a cambiar las circunstancias, como veras.
Besos
Qué bien cuentas todas las contradicciones de Molenbeek, que son las del sistema en que vivimos.
ResponderEliminarContradicciones, siiiiiii! Y es que como siempre, los de a pie pagan por algunas "celebridades" y ellos,los mas pobres, ignorantes, credulos y aislados de todo, son arrastrados en esa marabunta "divina".
EliminarSaludos