Siete de la tarde. El capulín rezuma de agua y cerezas
verdes. Un murciélago se afana entre las ramas, sale disparado hasta el mango y
vuelve como un rayo, una y otra vez, hasta casi tocarnos as cabezas. Se
despiden hoy las amigas.
“Vamos a quedarnos una noche en Mamallapuram y de allí
iremos al aeropuerto. Parece que Chennai no tiene gran interés, nos han dicho.”
Y me quedo pensando ante lo tantas veces repetido por mi
también y me prometo hacer justicia a esta ciudad, tan cercana y sin embargo
tan desconocida.
Así me entero de que la India forma parte de la Unesco
desde 1946 (España desde 1952) y que no sólo existen PATRIMONIOS DE LA HUMANIDAD
reconocidos por la UNESCO, material e inmaterial, en la India, sino de que
también tres de sus ciudades han pasado
a formar parte de la red de CIUDADES CREATIVAS de la UNESCO: JAIPUR, VARANASI y
hace un año CHENNAI o MADRAS, como la conocíamos antes.
La ”Creatividad” se manifiesta en la música, la
gastronomía, la artesanía, el diseño, la literatura… como factor estratégico
para un desarrollo urbano sostenible. Son
180 ciudades de 72 países que interactúan, que cooperan para materializar el
proyecto de la Unesco de DESARROLLO URBANO SOSTENIBLE para 2030, “satisfaciendo
las necesidades del presente sin hipotecar las de las generaciones venideras”.
MADRAS, como me
gusta llamarla, ha sido aceptada en 2017 por su rica tradición musical:
CARNATIC, folclórica, de danza, occidental. ¡MADRAS es la Música!.
Todo el año, pero especialmente en diciembre-enero (MARGAZHI del calendario tamil), Madrás,
la capital del estado de Tamil Nadu, es el imperio de la música, la danza, el
teatro, el arte en todo su esplendor…
Músicos, vocalistas, bailarines, cuentistas reconocidos
compiten en teatros y SABHAS ante un
público devoto, entendido, entregado.
(A Sabha
in South India, particularly in Tamil Nadu, popularly refers to a body or
organization involved in the promotion of fine arts such as Saastriya Sangeetham, Bharathanatyam,
Drama among numerous other arts. These Sabhas are concentrated at a place
called as [Mylapore] in Chennai and are instrumental in ensuring the
connoisseurs (known as Rasikaas) from all parts of the
world treated with variety during the Music and Dance Season of
Maargazhi (December / January mostly).
Pero, qué público? Qué espacios? Qué santuarios? Qué
arte?
Estas preguntas
asaltaron un día la mente de T.M.KRISHNA, famoso vocalista CARNATIC (música CARNATICA,
clásica del sur de la India), autor, premio Ramón Magsaysay en reconocimiento a
su aportación a la música.
Y así, un día en 2014, junto con el activista ambiental
NITYANAND JAYARAMAM decidió “hacer el arte asequible a todos”.
Poesía,
recitales, música, danza, teatro, cuentistas… todo fuera de espacios
privilegiados clásicos, promovido en las redes sociales, financiado por suscripción
popular (crow-founded), de libre participación, de cero residuos.
El lugar elegido seria
URUR OLCOTT KUPPAM, poblado de pescadores depauperado cercano a BASANT
NAGAR, zona residencial de elite de las más caras de Madrás, olvidado de todos
los dioses.
Se invitaría específicamente a la gente de Madrás a
conocer este poblado y así ayudaría a romper el estereotipo nefasto y los
miedos ancestrales.
“Este URUR-OLCOTT KUPPAM VIZHA (festival de las artes) ha
hecho posible una apertura sin especifica identidad que enriquece cada parte de
uno mismo y revitaliza el propio arte.; ha permitido el encuentro de diferentes
clases de gente y ha cambiado la forma en la que percibimos la vida de cada uno
de los OTROS”. Explica T.M.KRISHNA.
Fácil? Vencimiento de resistencias por ambas partes (pescadores,baja
casta/la elite, clases medias)? Cooperación? Aceptación?
Los voluntarios limpiaron la playa, instalaron los
estrados, invitaron a los artistas clásicos y marginalizados, a los jóvenes, a
los niños, a participar todos. Entraron en las redes sociales para dar a
conocer el proyecto y lograron 400000 rupias (5000 E) para financiarlo y poder actuar con toda
independencia.
Este experimento socio-cultural ha planteado muchas
preguntas y ha obtenido ya algunas respuestas. Es sólo un intento, un primer
paso, se necesitan muchos más por diferentes caminos para desarrollar un nuevo
lenguaje para la interacción humana.
La música, el arte, la cooperación, la visibilidad, ha
facilitado la comunicación entre la gente de este poblado y las autoridades de Madrás
a través de abogados y activistas sociales. Han reclamado sus derechos: agua
potable, saneamiento, mercado de pescado, escuela renovada, calles…
Gracias a esta iniciativa ha mejorado, además, el estatus
socio-económico de esta comunidad de pescadores de 600 habitantes. La
esperanza, la fuerza, han renacido de la mano del arte.
URUR OLCOT KUPPAM se prepara para la próxima edición del
festival en febrero 2019.
En MADRAS, CIUDAD CREATIVA DE LA UNESCO
FOTOS: CORTESIA DE GOOGLE
Ayyayay! Cuanto tiempo ha pasado a remojo de este monzon imparable...
ResponderEliminarSe acerca la temporada de musica y danza de Madras.
Mi descubrimiento del URUR OLCOT KUPPAM VIZHA lo hace irresistible.
Os invito.
Saludos